Damos por hecho que llegados a este punto tú y tu pareja han platicado sobre sus deseos y expectativas de vida, y al haber logrado embonar todos ellos han tomado la decisión de casarse, por lo que empatar sus deseos y expectativas sobre su boda será mucho más sencillo o al menos, debería de serlo.
La clave para vivir la planeación de tu boda en armonía con tu pareja consiste en que antes de iniciar el proceso tengan una conversación profunda y sincera para sentar las bases, poner las cartas sobre la mesa, en donde cada uno exprese cuáles son sus deseos y expectativas, que actividades realizará, y cuáles serán sus aportaciones particularmente de tiempo y dinero con el objetivo de llegar a acuerdos y evitar conflictos y malos entendidos posteriores.
Tómense un día, una mañana, una tarde, una semana o el tiempo que consideren necesario, para que puedan estar solos tú y tu pareja, con el único propósito de conversar absolutamente todos los temas importantes relacionados con la boda.
Estos son algunos puntos que pueden servirte como guía sobre los temas que deben tratar en ésta conversación:
1. Tipo de boda:
¿Desean una boda pequeña e intima o una gran fiesta?, Definir el tipo de boda que están buscando les ayudará a tomar decisiones en la misma dirección.
2. Tipo de ceremonia:
¿Prefieren una ceremonia civil, religiosa o simbólica?, Hablen sobre el tipo de ceremonia que más los represneta y que se alinee con sus valores. Esto les permitirá crear un momento significativo y especial, reflejando lo que realmente importa para ambos.
3. Tradiciones y costumbres:
Conversen si desean incormporar alguna tradición familiar o cultural en su ceremonia o en la fiesta, o bien si prefieren algo más personalizado. Esto puede ayudar a que ambos se sientan represnetados en su celebración.
4. Presupuesto:
Uno de los temas más importantes y, a veces, sensibles es el dinero. ¿Ambos aportarán?, ¿Cuánto aportará cada uno?, ¿Las familias van a contribuir?, Si las familias contribuyen ¿de que forma influirá su participación en las decisiones? Hablar de presupuesto y definir quien cubrirá que gastos ayudará a evitar tensiones durante el proceso y garantiza que ambos estén en la misma sintonía respecto al tamaño del gasto que desean hacer para la realización de su boda.
5. Participación de las familias:
¿Quieren que las familias opinen sobre la planeación de la boda? Muchas veces, las familias tienen ideas, deseos o expectativas sobre como debería ser la boda. En este punto, es clave que ambos acuerden qué papel jugarán en el proceso, ¿serán parte de las decisiones o solo compartirán ideas?Establecer los límites desde el principio sobre cómo, en qué y hasta donde permitirán su participación les dará tranquilidad y les permitirá tener más control.
6. Lista de invitados:
Crear la lista de intviados es uno de los pasos complejos en el proceso de planeación. Decidan y establezcan juntosdesde el inicio los criterios para invitar, ¿habrá niños?, ¿sólo amigos cercanos?, ¿le darán doble pase a sus amigos solteros? Establecer parámetros los ayudará a construir una lista equilibrada y que refleje totalmente sus deseos sin presiones externas.
7. Tiempo dedicado:
Planear una boda lleva mucho tiempo y es muy importante que ambos estén dispuestos a comprometerse con el proceso. Decidan cuánto tiempo dedicará cada uno semanalmente para que el preoceso de planeación no sea una carga para niguno. Solo asegúrense que sea realista para sus agendas. Esto permitirá que ambos estén involucrados de una forma equilibrada y en la medida de sus posibilidades.
8. Roles y tareas:
¿Quién hará qué durante la planeación de la boda? Dividir las tareas desde el inicio evitará malos entendidos, hará que ambos se sientan involucrados en el proceso, pero sobre todo que su participación es equitativa.
9. Difererencias:
Durante el proceso de planeación, es muy común que surjan desacuerdos. Platiquen desde un inicio cómo resolverán los conflitos y comprométanse a escucharse con empatía, recordando que el objetivo de todo es la celebración de su amor.
10. Imprevistos:
La posibilidad de que surjan imprevistos siempre existe, por eso, es importante que platiquen sobre cómo van a manejarlos. Tener un plan de contingencia o estar de acuerdo en flexibilizar ciertos aspectos les dará tranquilidad cuando algo salga diferente a lo planeado.
11. Tiempos de descanso:
La planeación de una boda puede volverse un proceso muy absorbente y retador, por lo que es muy importante reservar tiempos para descansar y mantener una conexión como pareja. Planifiquen citas o momentos en los cuales eviten platicar sobre la boda para recargar energía.
12. Expectativas sobre el proceso de planeación:
Pongan en palabras cómo esperan que sea esta experiencia, tanto en los moemntos de alegría como en los de estrés. Hablar de sus expectativas y posibles retos les ayudará a afrontar este camino como un equipo.
Es muy probable que no estén de acuerdo en todos los temas, puede existir la posibilidad de que tal vez buscan bodas completamente diferentes, así que aquí llega el momento de buscar y encontrar el punto intermedio entre lo que cada uno quiere.
Esta es la parte en la que ambos tendrán que negociar unas cosas a cambio de otras. Vale la pena tomarse el tiempo que sea necesario antes de iniciar para establecer todos los acuerdos que requieran, ya que si no logran encontrar el punto intermedio desde un inicio, es muy probable que conforme avance la planeación empezaran los desacuerdos y con ellos vendrán los conflictos y esto les puede generar mucho estrés, además de que perderán mucho tiempo, dinero y esfuerzo buscando proveedores, productos y servicios sin un objetivo claro y en común.
Si inician con claridad, cada decisión será más facil y podrán disfrutar del proceso al máximo y vivirlo en armonía.